Suecia no es uno de los países destacados mundialmente por su producción vinícola. Sin embargo existe un lugar no muy lejos de Estocolmo realmente interesante para los amantes de la enología, la viticultura y todo lo relacionado con la cata de vinos, las bodegas y los viñedos. Se trata de los viñedos de Blaxsta o Blaxsta Vingård, los viñedos más septentrionales del mundo.

Viñedos de Bläxta
Foto: Björn Tesch / imagebank.sweden.se
En Flen, a unos 130 km al suroeste de Estocolmo y a 45 minutos del aeropuerto de Estocolmo-Skavsta (destino de los vuelos de Ryanair), una ciudad situada en el triángulo formado por Katrineholm, Strägnäs y Gnesta se encuentra el mayor centro de producción vinícola de Suecia. Rodeados de castillos medievales, monumentos vikingos, lagos cristalinos y pueblecitos encantadores que hacen gala de la belleza natural de la región de Södermanland se encuentran los viñedos de Blaxsta. De entre los viejos manzanos de Äkero surgen los vinos helados, obtenidos a partir de uvas que han sufrido fríos extremos, y los vinos afrutados que dan lugar a productos como el Apple Ice Wine Äkero.
Más de 2,6 hectáreas de viñas que producen variedades de uva como Chardonnay, Vidal, Merlot o Cabernet Franc entre otras. En busca de nuevos sabores se lleva a cabo una selección cuidadosa de las uvas y de frutas como frambuesas silvestres, ciruelas monarca, manzanas heladas y un envejecimiento en barricas de castaño, olmo o tilo. Toda la producción se realiza en unos edificios renovados que datan del siglo XVII y alcanza unas cifras anuales de unos 8000 litros distribuidos en unas 8 a 10 variedades distintas de vino.
Además de la parte teórica en los viñedos de Blaxsta también se puede ejercer la práctica con una cata de vinos a la que se puede añadir una guía que explica las diferencias entre las respectivas variedades uva, un buffé con deliciosos platos suecos, postre y café. Bajo demanda se pueden organizar también clases de cocina o de recolección de uva.
Es posible incluso reservar alojamiento y desayuno en el Hotel Blaxsta Vineyard o un local para conferencias y charlas de empresa o quedarse a comer en el restaurante que ha sido galardonado con cuatro copas de champán sobre cinco posibles por la Academia Gastronómica Francesa.
En definitiva, los viñedos de Blaxsta pueden constituir una experiencia muy gratificante para el viajero que no se conforma con las actividades turísticas cotidianas y que desea incluir en su agenda una combinación del placer visual del área de Södermanland y del placer gustativo de los vinos producidos más al norte del mundo.