En todos los viajes hay hoteles que dejan huella y en un viaje de un mes por Suecia hemos visitado muchos pero dormir en el romántico Gränsö Slott de Västervik ha sido una experiencia increíble. Hacer uso de su spa, sus jacuzzis o de la sauna flotante de la que sales para sumergirte en el mar en un caluroso día de verano rodeado de un entorno natural precioso es simplemente indescriptible. Y es que el castillo de Gränsö es de los pocos que tienen categoría 4* superior en Suecia. No es para menos. Las instalaciones en su conjunto son impresionantes. No es de extrañar que su lema sea «beauty by the sea» – belleza junto al mar.

Vista aérea del hotel spa Gränsö Slott en Västervik
Llegamos a Västervik después de una semana de viaje deseando por fin reponer energías para continuar nuestro viaje. Nada más llegar al hotel supimos que íbamos a encontrarnos de lujo teniendo en cuenta su ubicación y con las habitaciones a apenas 20 metros del mar. En Gränsö Slott nos sentimos como esos viajeros cansados que encuentran un oasis en el que refrescarse física y espiritualmente.

Hotel Gränsö Slott en Västervik
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com
Tanto el lobby del hotel como los pasillos respiran diseño por los cuatro costados y gozan de amplios ventanales para aprovechar al máximo la luz.

Lobby del hotel Gränsö Slott
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com

Diseño en el interior de Gränsö Slott
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com
El hotel Gränsö Slott cuenta con 48 habitaciones. Para nosotros abrir la puerta de la habitación fue entrar en modo «desconexión del mundanal ruido» y decidirnos a disfrutar la estancia al máximo. La habitación era acogedora, con ese gusto por la decoración que los suecos tan prolijamente manifiestan, pero a la vez muy mediterránea.

Habitación en Gränsö Slott
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com
Pensábamos que la habitación tenía una terraza pero no, es mucho mejor, al estar situada en la planta baja da a un paseo que va hacia la piscina, las tumbonas para tomar el sol, la playa y el mar. Directamente sales de tu habitación enfundado en tu bañador, tu albornoz blanco nuclear y tus zapatillas para quitártelo (casi todo) y meterte en una de las muchas opciones de agua disponible.

Tomando el sol
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com
La piscina infinita con vistas de Västervik es simplemente impresionante. Y cercana a ella hay una piscina con el agua un poco más caliente.

Piscina infinita con vistas a Västervik
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com

Piscina termal en Gränsö Slott
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com
Un poquito más abajo junto al mar y al lado de la playa del hotel está la sauna y casa de baños fríos y un paseo paralelo al mar junto a unas sillas para sentarse a tomar el sol, charlar y relajarse mientras uno se toma algo. En invierno los más atrevidos salen de la sauna y se meten en un hueco en el hielo en pleno mar helado. ¿Te atreverías?

Disfrutando el sol de media tarde en Västervik
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com
Su spa de 600 m2 tiene 8 tipos de piscinas a distintas temperaturas. La parte de aguas del Gränsö Slott, el spa y las piscinas termales y jacuzzis así como la sauna junto al Báltico lo hacen ideal para una escapada de relax en pareja de dos o tres días o para descansar tras varios días de ruta. De hecho tienen paquetes de fin de semana con spa o paquetes románticos de lujo.

Zona de aguas en el hotel Gränsö Slott
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com

Zona de aguas en el hotel Gränsö Slott
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com
El Castillo de Gränsö
El castillo propiamente dicho está situado a unos 100 metros del hotel. El edificio data de 1850 y se construyó con una fachada que se asemeja a la del palacio de Rosendal en la isla de Djurgården en Estocolmo al que tomó como referencia. Es aquí donde se sirven los suculentos desayunos por las mañanas y buenas cenas por la noche. También en la zona entre el castillo y el hotel se encuentra una cafetería.

Castillo de Gränsö al atardecer
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com

En el interior de Gränsö Slott
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com
El Restaurante de Gränsö Slott
De la parte del restaurante cabe destacar la historia de sus menús que nos traslada al 1739 cuando Gustav Abraham Piper, un soldado perteneciente a los carolinos suecos, al que le entusiasmaba la comida decidió escribir a mano un libro de recetas de cocina tradicionales para su mujer Märta Sture. Le cundió y se extendió por ¡248 páginas! Durante la guerra el pobre Gustav había vivido a base de gachas por años y ya de vuelta en Suecia vio la oportunidad de dar rienda suelta a su pasión por la gastronomía y la cocina. El libro que escribió, ahora conservado en el Nordiska Museet de Estocolmo – con una copia en Gränsö – es el único de su época que habla de las costumbres gastronómicas en los castillos y casas solariegas de la Suecia del siglo XVIII.
El menú del restaurante rinde homenaje a este apasionado de la cocina con sus platos a base de pechuga de pato ahumada, sopa de cangrejos, patés de lucio y muchas otras delicatessen históricas. Por supuesto también tienen platos italianos e internacionales. Nosotros cenamos una noche allí. El precio anda entorno a los 50 € por persona con entrante a compartir, un segundo, una copa de vino y una cerveza.

Degustación en Gränsö Slott
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com

Plato en el restaurante de Gränsö Slott
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com

Pato ahumado segun las recetas tradicionales de Gränsö
Foto: Israel Úbeda / sweetsweden.com
El castillo de Gränsö está en la península homónima a 10 minutos en coche del centro de Västervik y muy cerca de una reserva natural. Curiosamente no encontraréis barreras que impidan el acceso de personas que no se hospedan en el hotel. Esto consigue que habitantes de Västervik y otras personas que esten de visita puedan pasear por los caminos que atraviesan las instalaciones creando así un espacio abierto donde se mezclan turistas, huéspedes y lugareños.
Si os acercáis hasta esta zona de Suecia tenéis que dormir en este hotel sí o sí. Lo vais a disfrutar como lo hacen las más de 100.000 personas que se alojan en Gränsö Slott cada año. Consultad ahora bajo estas líneas el precio para pasar unas noches en el castillo de Gränsö mediante Booking.com.
Västervik, a medio camino entre Kalmar y Norrköping, es en sí una ciudad que merece la pena visitar así como también lo es el archipiélago frente a su costa. Es para planteársela en un viaje de Malmö o Copenhague a Estocolmo por la costa este de Suecia.