Aunque la situación laboral en Suecia no es similar a la vivida hace años donde la tasa de desempleo era bajísima y uno podía permitirse el lujo de cambiar de trabajo con facilidad sigue habiendo opciones laborales en el país nórdico sobre todo para aquellos que os dedicáis a la informática (programación, redes, programación para móvil iOS, Android, etc) y las demás tecnologías de la información y comunicación.
Suecia es un país innovador y creativo, de eso he hablado largo y tendido en este blog y es de sobras conocido por todos, y ahora está emergiendo como un país tecnológico. Spotify, Klarna (permite comprar online sin usar tarjeta de crédito), Mojang (los creadores del popularísimo Minecraft), Stardoll, Wrapp y otras son algunas de las startups que más renombre internacional han obtenido recientemente unidas a empresas de hardware como Zound Industries (con sus auriculares) o Tobii (con tecnología de captura y seguimiento de movimientos oculares). Pero la cosa viene de antes con los anunciantes de Tradedoubler, la base de datos opensource MySQL, la empresa de videojuegos DICE, la comunicación multidispositivo y por voz sobre IP con Skype, etc.
El Economist se hizo eco de este hecho en mayo de 2013. La agencia Reuters también le dedicó en febrero un espacio al boom de las startups en Suecia (solo en Estocolmo hay más de 50).
Una web de reciente creación que pretende reunir a los emprendedores detrás de estas startups es Swedish Startup Space. Además ofrecen un interesantísimo apartado «Jobs» (de momento en beta pública) donde encontrar ofertas de trabajo en Suecia relacionadas con este tipo de industria. Con la cantidad de jóvenes españoles en busca de un futuro mejor y de sentirse realizados trabajando en lo que les gusta y han estudiado, mirar al exterior es una necesidad y una obligación.
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No es de extrañar que «faciliten» la creación de «start-ups» ya que la tendencia es hacer desaparecer el concepto de «empleo por cuenta ajena» y sea preponderante el del tipo «empleo por cuenta propia». Es un indicativo de que Suecia está claudicando a los intereses imperialistas (vamos, a los del mercado) La carrera, ahora, es saber qué país ofrece ventajas más atractivas para quien desee crear una «start-up» que, por cierto, de toda la vida se ha llamado «empresa».